Este nuevo álbum podría describirse como una introspección musical. Si bien es cierto que puede parecer sombrío a primera vista, la banda cree que refleja con honestidad las experiencias que han vivido en estos últimos años. Ha sido un período de grandes contrastes, de momentos de euforia y otros de profunda tristeza. A través de cada canción, The Sweet River Band ha querido plasmar ese viaje emocional, ese camino interior que les ha transformado. Es una invitación a conectar con las propias sombras y a encontrar belleza en lo desconocido. Es un tránsito de fuera adentro y de dentro afuera. En The Sweet River Band nos encontramos con una banda que hace todo directamente desde el corazón y desde un amor incondicional hacia la música. Canciones hechas como antes, de una manera artesanal y siempre pensando en que fueran como la banda querían que sonaran, sin que ninguna moda o similar se interpusieran en su camino. A lo largo de su trayectoria, han recorrido toda la península, tocando en salas como Galileo Galilei en Madrid o participando en festivales como Alcalá Suena y en prestigiosos eventos musicales y audiovisuales como Los Conciertos de Radio 3 o los Escenarios Virtuales de Guadalajara. |